¿Cuál es la diferencia entre la política fiscal y la política monetaria?

Política monetaria: definida

La política monetaria es el proceso por el cual el banco central de una nación controla la oferta de dinero. Esto se puede hacer de varias maneras, pero lo más común es que se haga a través de los tipos de interés. El banco central puede subir o bajar los tipos de interés para tratar de estimular o ralentizar la economía. La Reserva Federal decide si expandir o contraer la economía en función de una variedad de métricas, incluido el producto interno bruto (PIB), el desempleo y la inflación. El objetivo de estimular la economía es mejorar el PIB. Mientras tanto, una política monetaria más restrictiva tiene la intención de desacelerar la economía para poder gestionar la inflación en el presente o en el futuro.

Política fiscal: Definida

La política fiscal describe la tributación y el gasto por parte del gobierno. Con esto, es posible influir en la economía a través de aumentos o disminuciones en los impuestos y/o gastos de dinero por parte del gobierno. También se puede utilizar para tratar de mantener un presupuesto equilibrado para el país. Algunos ejemplos comunes de políticas fiscales incluyen: aumento de las tasas de impuestos federales sobre la renta, aumento del gasto público en programas públicos, aumento/disminución de los impuestos para ciertos tipos de ingresos (es decir, ganancias de capital) y disminución de los pagos de transferencias del gobierno (bienestar).

Autoridades monetarias vs. autoridades fiscales

Se considera que la Reserva Federal es la autoridad monetaria, mientras que el Presidente y el Congreso son responsables de tomar decisiones de política fiscal a través de medidas de impuestos y gasto. Las 2 políticas están unidas: la política monetaria solo puede ser efectiva si está alineada con los objetivos de la política fiscal del gobierno. Por ejemplo, si la Reserva Federal quiere aumentar el gasto en la economía, necesitaría que el Presidente y el Congreso acuerden reducir los impuestos o aumentar el gasto del gobierno. Por otro lado, si la Reserva Federal quiere disminuir el gasto en la economía, necesitaría que el Presidente y el Congreso acuerden aumentar los impuestos o disminuir el gasto del gobierno.

La diferencia entre la política monetaria y la política fiscal

Si bien la política monetaria y fiscal está relacionada, son dos formas diferentes de gestionar la economía. La política monetaria se centra en el control de la oferta monetaria mientras que la política fiscal se centra en el control de los impuestos y el gasto por parte del gobierno. La política monetaria funciona más eficazmente cuando está alineada con los objetivos de la política fiscal. Sin embargo, los funcionarios deben tener cuidado con el uso de la política fiscal para influir en las autoridades monetarias porque esto puede resultar en una inflación descontrolada. Por ejemplo, si el banco central de una nación quiere estimular la economía bajando aún más las tasas de interés, el presidente y el Congreso pueden decidir gastar más. Pero si esto lleva a una inflación desbocada, el banco central tendrá que volver a subir las tasas, lo que podría llevar a una recesión o incluso a una depresión. En una nota similar, la política fiscal ha sido menos efectiva desde la Gran Recesión de 2008 porque muchos gobiernos no han implementado políticas que se alineen con la política monetaria expansiva. Por ejemplo, algunos países han subido los impuestos o reducido el gasto ya que el banco central ha estado tratando de estimular la economía. En otros casos, algunos países simplemente no han implementado ningún estímulo fiscal en absoluto ya que el banco central ha mantenido los tipos bajos.

Por qué es importante entender las políticas fiscales y monetarias

Es importante que los ciudadanos y los responsables políticos por igual comprendan la diferencia entre la política monetaria y la política fiscal porque pueden tener un impacto significativo en el crecimiento y la estabilidad económica. Para los ciudadanos, es importante poder hacer que su gobierno rinda cuentas de la efectiva formulación de políticas fiscales. Y para los responsables políticos, es importante poder utilizar ambas políticas de forma adecuada para gestionar la economía.

La línea de fondo

Las políticas fiscal y monetaria están relacionadas pero diferentes formas de gestionar la economía. La política monetaria se centra en el control de la oferta monetaria, mientras que la política fiscal se centra en el control de los impuestos y el gasto por parte del gobierno. Estas políticas están unidas en un yugo, y cada una tiene que ser efectiva para que la otra también sea efectiva. Por último, es importante que los ciudadanos y los responsables políticos comprendan cómo estas políticas trabajan juntas para gestionar la economía.

¿Cuál es la diferencia entre la política monetaria y la política fiscal?

La política monetaria se centra en el control de la oferta monetaria mientras que la política fiscal se centra en el control de los impuestos y el gasto por parte del gobierno.

¿Cuáles son los objetivos de la política monetaria?

Los objetivos de la política monetaria varían según el país, pero generalmente se pueden resumir en: 1. inflación baja y estable, y 2. alto empleo y crecimiento económico.

¿Cómo puede ser efectiva la política fiscal cuando es independiente de la política monetaria?

La política fiscal sólo puede ser efectiva si está alineada con los objetivos de política monetaria del gobierno. Por ejemplo, si la Reserva Federal quiere aumentar el gasto en la economía, necesita que los funcionarios encargados de la política fiscal estén de acuerdo con este objetivo. Si las políticas fiscales y monetarias no están alineadas, entonces pueden trabajar unas contra otras, lo que puede resultar en un menor crecimiento económico o incluso en una recesión.

¿Qué es la trampa de liquidez?

Una trampa de liquidez ocurre cuando los tipos de interés ya están muy bajos y las personas no están pidiendo prestado o gastando dinero porque no ven oportunidades de inversión atractivas. Esto puede llevar a un menor crecimiento económico o incluso a una recesión.

¿Cómo está relacionada la política fiscal con el ciclo económico?

La política fiscal puede ayudar a gestionar el ciclo económico al afectar a la demanda agregada. Por ejemplo, si el gobierno decide aumentar el gasto en la economía durante una recesión, puede ayudar a estimular el crecimiento. Por el contrario, si el gobierno decide reducir el gasto en la economía durante una expansión, puede ayudar a enfriar la economía.